Unos 700 mil votantes hispanos más que en 2006 acudirán a las urnas en las elecciones estadounidenses del 2 de noviembre, según cálculos del grupo de presión latino La Raza, informó este jueves su presidenta, Janet Murguía.
"Todas las estadísticas indican que deberíamos aumentar en estas elecciones a mitad de presidencia, como mínimo 700 mil votantes hispanos por encima de lo que vimos en 2006", dijo Murguía citando un informe de su grupo de presión, durante un debate sobre voto hispano en el Centro para el Progreso Americano (CAP).
Otro informe de una formación que agrupa a cargos electos hispanos a nivel estatal y local, NALEO, divulgado esta semana, calculó que la participación de los hispanos podría elevarse a 6.5 millones de votantes, un millón más que en 2006.
En las presidenciales de 2008 la participación hispana batió récords y se situó en 9.7 millones de personas, dos tercios de las cuales votaron a favor del entonces candidato demócrata Barack Obama.
La participación en las elecciones legislativas para renovar la Cámara de Representantes y un tercio del Senado es generalmente más baja que en las presidenciales.
"Hay una sensación creciente de que no solamente nuestro voto cuenta, sino de que es necesario que los partidos y candidatos respondan ante esta parte del electorado", aseguró Murguía.
Los hispanos representan un mínimo del 10% de los votantes en ocho estados, recordó Murguía.
Sin embargo, un amplio estudio del centro de análisis Pew Hispanic Center mostró el pasado 5 de octubre que solamente la mitad de los hispanos ya registrados para ir a votar lo harán efectivamente.
Eso contrasta con el 70% del conjunto de votantes estadounidenses.
"Nuestro desafío es la economía" y el impacto de pérdida de empleos y de casas que ha representado la crisis económica, reconoció Murguía al ser preguntada sobre la posibilidad de que las cifras de La Raza sean demasiado optimistas.